la fe de los primeros cristianos

Tengo varios días pensando como sería la Fe de los primeros cristianos. Como sería su vida, para que un puñado de hombres lograran transformar el mundo y dar a conocer a Jesucristo hace 2000 años sin internet, ni computadoras, ni teléfonos inteligentes, ni redes sociales, ni aviones y sin embargo, yo, como muchos, sigo sus enseñanzas.

Entonces descubrí que:

• Ellos vivían su Fe intensamente, si lo pongo en números sería 24 horas al día, 7 días a la semana, los 365 días del año.

• Tenían unidad de vida, es decir eran católicos a tiempo completo y no de a ratitos, pues sus pensamientos, palabras y obras estaban orientadas en buscar la voluntad de Dios.

Con esto puedo reflexionar y preguntarme ¿Cómo estoy viviendo yo mi Fe?, y aquí una listas de preguntas, que me ayudarán a trabajar puntos de lucha.

• ¿Mis pensamientos, acciones, conversaciones están orientados para hacer mi voluntad o la de Dios?

• ¿Busco a Dios siempre o me busco yo?

• ¿Quiero sobresalir o que el autor de todo sea Dios?

• ¿Ese libro que estoy leyendo o quiero leer, el programa de TV, película que estoy viendo o quiero ver, me enriquece, me hace crecer, me acerca a Dios?¿Jesús lo leería?

• ¿Busco a Dios en cada instante de mi día, o de a ratitos, en la mañana y en la noche y luego vivo como si Dios no existiera?

• ¿Mis conductas, acciones, conversaciones me acercan a Dios o me alejan de Dios?

• ¿Tengo mi  confianza puesta en mis propias fuerzas o tenga mi confianza puesta en Dios?

• ¿Me quejo de lo que no tengo o agradezco y disfruto lo que si tengo?

• ¿Vivo el aquí y el ahora o me mortifico por cosas que todavía no han ocurrido o estoy anclado en el pasado?

• ¿Saberme hijo amado de Dios me hace feliz?

• ¿Poseo cosas para mi uso o soy esclavo de las cosas que poseo?

• ¿Vivo consciente y teniendo presente de que Jesús está vivo?¿Que resucitó?

En la medida que yo tienda a buscar a  Dios en todo momento, me iré transfigurando y será a través de mi ejemplo que otras almas que me rodean también se transformarán.

Seamos la levadura que transforma

María Angélica